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Bodas de Isabel, primavera… Gira la rueda estacional en la ciudad del Toro y la Estrella,
y este 13 de febrero se cumplían 25 años desde que los Amantes Isabel y Diego, se encarnaron
por las calles de Teruel, viviendo y sintiendo de nuevo su impresionante historia de Amor.
Después de 800 años, la ciudad se engalana año tras año y se vuelca, enamorada, para acompañar
a los protagonistas del mito. Un mito que, aunque anclado en este lugar y tiempos determinados,
lo es universal; no deja indiferente a nadie y emociona y da sentido a miles de personas en cualquier
parte del mundo.
En torno al Amor y la Muerte, la ciudad, y todos los que comparten estos hechos, se pone en valor
la solidaridad, colaboración, creatividad y patrimonio, con una energía colectiva que supera los
determinismos y la negación. Año tras año, desde un pequeño germen en 1997, la fiesta ha crecido de
forma exponencial traspasando fronteras, creando un mundo de ilusión y de esperanza para esta pequeña
ciudad, dentro de la inmensidad del planeta, que encuentra aquí su propia luz, y con ella una buena
parte de su desarrollo y de su futuro.
¡Que vivan las Bodas de Isabel!
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